jueves, 28 de mayo de 2009

Vamos allá

No es el momento apropiado porque tengo demasiadas preocupaciones como para añadir más. Pero, como siempre, la Luna me sabe a poco. Inconformista como nunca, cada vez destierro aún más la racionalidad que quedaba en mí. Pensar está bien y razonar es lógico, pero acaso no pensar está mal? ¿Lo ilógico e irracional es malo? El día que la pasión que tengo por vivir se me acabe, matadme. No hay nada peor que vivir sin ganas, pensando que un día llegará aquello que te sacará de la mierda. La vida no es así. Hasta los malos días son un regalo y de todos se puede sacar algo, por eso no me conformo. Por eso quiero más. Por eso me encanta sentirme vivo.

No dejaré de enloquecer aunque el suelo muestre su frialdad

Sykler

martes, 26 de mayo de 2009

Rutina

Rutina, rutina, rutina.. Millones de veces hemos sentido como nos abraza fuertemente la rutina. Cómo nos agobia, como invade cada rincón de nuestra vida, atacando a la ilusión, atacando a los sueños. Millones de veces intentamos escapar de ella, porque la rutina acaba con relaciones, nos hace olvidar lo mucho que algo significa para nosotros..
Pues bien, yo últimamente me estoy abrazando a la rutina voluntariamente. La rutina te mantiene ocupado. La rutina se lleva tus rayadas mentales igual que se puede llevar la ilusión y los sueños. Tal vez sea justo por eso por lo que se lleva las rayadas. Pero.. ¿qué mas da? El caso es que ella consigue que te despreocupes. Ella mantiene mi cabeza fría, y eso a la larga, y en este caso, es mucho mejor. Amigos, no siempre es un problema el abrazarse a la rutina. Yo solo aspiro a vivir mi vida sin que mis noches estén llenas de arrepentimiento. Y miren ustedes por donde, la rutina se ha convertido en mi escudo.


PD Tras una magnífica historia relatada por el maestro Sykler, me digno a actualizar aunque sea con algo tan breve para que nadie me pueda acusar de pasota.


MORANTE

martes, 19 de mayo de 2009

Capítulo 4. Miedo.

A la mañana siguiente, cuando Marcos se levantó, miró a su izquierda. Ahí estaba Cris. A su derecha estaba la mesilla, donde estaba su movil. Lo miró. 4 llamadas perdidas, 1 mensaje nuevo. Todo de Lucía. "¿Donde estás? Estoy en la fiesta, queria verte. Tus amigos no saben nada. ¿Estás bien? Te quiero" Hora, 4 y cuarto. La que se había montado... Marcos estaba demasiado preocupado con el mensaje como para darse cuenta de que Cris acababa de despertarse también.

- ¿Qué pasa?

Le enseñó el móvil. Cuando ella había leido el sms, le miró. Él llevaba mirandola un rato. Su mirada parecía confusa, como diciendo "¿Qué hago?".

- Quédate conmigo - dijo ella.

Sin embargo, él volvía a tener miedo. A fin de cuentas, no confiaba del todo en Cris, no tanto como para tirar por la borda una relación seria. Ella sólo se había fijado ahora que él podía alejarse. No era suficiente.

Al poco tiempo, él buscó trabajo cerca de donde Lucía había vivido hasta ir a la universidad. Se mudaron y dejó todo atrás. Consiguió poner mil excusas de aquella noche, pero temía que Lucía lo descubriera. Dejó su mundo atrás: amigos, familia, Cris... Ahora sólo veía a su familia una vez cada dos semanas y muy de vez en cuando a algún viejo amigo. No tragaba a los amigos de Cris. Sólo aceptaba a muy pocos compañeros de trabajo. A eso se había reducido su vida.

FIN

Sykler

jueves, 14 de mayo de 2009

Capítulo III. Decisión.

No podía creerlo. Pasaba ahora. ¿Qué debía hacer él? ¿Merecía la pena jugársela por una noche? ¿Y si no fuera una noche sólo? Ese no era él. Miedo. Entonces, ¿qué iba a hacer cuando saliera del baño? ¿Huir otra vez? No quería. Salió, con un par de cojones, y fue dispuesto a hablar con Cris. Necesitaba explicarse.

- Cris, no has debido hacer eso
- Sé lo que sientes. Me contaron todo. Me sigues tratando igual, aunque tengas novia. Yo nunca te lo dije, pero no me hubiera importado tener nada contigo. Nunca había sentido más que eso. Pero... ahora he estado con varios tíos y ninguno ha sido capaz de tratarme como tú, y eso que no hemos estado juntos en la vida. Tenía miedo de perderte como ese apoyo que siempre has sido, por eso nunca pasó nada entre los dos. Ahora tengo miedo de dejarte pasar. No quiero perderte. Es el momento.
- ¡Qué facil es decirlo para ti! Tú no estás con nadie ahora. Yo llevo año y medio con una chica maravillosa.
- ¿Maravillosa? Todos sabemos que te intenta manipular a la mínima.
- Me quiere.
- Quizá. Pero no te merece.

Cris sabía como actuar. Él estaba cabreadisimo con Lucía, y ella estaba atacando al punto débil. Cris se acercó y volvió a ocurrir. Al poco tiempo estaban en casa de ella, que vivía con dos compañeras que estaban en la fiesta. De ahí al primer rayo de sol, mucho tiempo y sueños cumplidos.

[continuará]

Sykler

lunes, 11 de mayo de 2009

Capítulo II. Sentimientos cruzados

Fiesta de la promoción. Al fin, tras 5 años de risas, trabajo, llantos, esfuerzo, alcohol y fiesta, consiguieron la licenciatura. Lucía no acompañó a Marcos porque quería que fueran sus compañeros de clase. Marcos le dijo que no había motivo para que chicos de 20 años estuvieran por alli, ya que Lucía era tres años menor. Aquello era fiesta privada, para los licenciados de aquel año. Además, solo tenia invitacion para un acompañante. Ella se enfadó y no fue.

Ese día había mil sentimientos. Alegría por haber logrado el título. Pena porque muchos de ellos dejarían de verse, al menos de verse tan a menudo. Quizá muchos se distanciarían. Sobre las 3, llegó un momento en que Cris y Marcos bailaban. Para ojos extraños, incluso parecían más que amigos. Pero simplemente, era el reflejo de una amistad un tanto rara, con una química especial. Cris habló. No había bebido demasiado. Él, algo más.

- ¿Tú crees que nos volveremos a ver?
- ¿Por qué no? - Marcos no sabía que contestar... ¿tenía trampa esa pregunta? - Somos amigos, tenemos amigos en común, muchas cosas vividas. No somos de los que sólo se dicen Hola y Adiós en clase
- Tengo miedo de perder a mucha gente. A tantos amigos... y a tí.
- ¿Amigos y yo? ¿Acaso no soy un amigo?

Marcos no sabía realmente lo que acababa de decir. Era un simple comentario para reirse.

- No.

Y se lanzó... Ella se lanzó. Marcos no sabía como responder... aceptó el beso pero al acabar, fue al baño, tenía que pensar. Tanto tiempo esperándolo y pasaba cuando no podía pasar.

[continuará]

Sykler

jueves, 7 de mayo de 2009

Capítulo I. Intro.

Marcos volvía a casa en el tren de los viernes, el de las 15:06. Un duro día más de trabajo, al fin era hora de llegar a casa y... y descansar. Se miró y pensó si todo había merecido la pena. Viernes, las tres y poco. Hace tres años tendría el móvil ardiendo con llamadas y mensajes para salir. Hoy... hoy sólo tiene un mensaje de Lucía. "¿Comemos mañana con mis padres? Un beso". A eso se había reducido su vida. 25 años y la juventud se le había escapado entre los dedos. Dejó su época universitaria a más de 200 km. No es demasiado, pero suficiente.

Todo pudo cambiar el día que acabó la carrera, hace más de año y medio. Con la promoción de fiesta tuvo esa oportunidad de que llevaba 5 años esperando. Cris, aquella chica que le llamó la atención desde el primer día... y que le encandiló al segundo día que la vió, la primera vez que hablaron. Atracción. Atracción rara, de la que no te explicas. Química. Cuando la conoció estaban solteros, ambos. Él lo intentó, pero nunca lo vio del todo claro y no se atrevió. No atacó cuando debía. Desde ahí, cinco años de carrera. Cinco años en que la vida no les dio mucha oportunidad. Novios de ella, novias y líos de él, viajes, exámenes. Y sin embargo él nunca dejó de verla como una chica especial, no había día en que dejara de pensar en ella. Hasta que apareció Lucía. Entonces, sólo entonces, consiguió pasar algún día sin pensar en ella. Pero nunca la olvidó, porque la seguía viendo todos los días.

[continuará]

Sykler

martes, 5 de mayo de 2009

Viviendo deprisa

He nacido hoy de madrugada, viví mi niñez por la mañana y al mediodía ya caminaba por mi adolescencia. No es que me asuste que el tiempo pase tan rápido, pero sí me aterroriza la idea de llegar a viejo, mirar atrás, y ver que ya no hay tiempo para ser todo lo que he dejado pendiente por el camino.. La vida se mide por los momentos en que eres feliz y haces feliz a alguien. Eso es lo que no me quiero perder de mi propia vida.



"Felicidad, ¡qué bonito nombre tienes! Felicidad, vete tú a saber donde te metes.."
(LA CABRA MECÁNICA, Felicidad)


Morante

viernes, 1 de mayo de 2009

Select option - en clave de canción

Decía Extremoduro me has alterado poniéndote a mi lado, yo que vivía tan feliz en un tejado. "Vivía". Bajé del tejado hace ya mucho tiempo, y ahora disfruto de cada detalle del suelo. Quedamos cerca del suelo, donde se refleje la luna. Hay tantos detalles en el suelo... Hay días que descubres una nueva grieta, hay días que profundizas en grietas que llevan ahí un tiempo largo. Reincidentes me dijo: muerte a lo perfecto, es mejor la variedad. Y cuánta razón llevaba.

En la variedad seguro que encuentras complicidad, como quien apuesta dobles en la quiniela. A más opciones, más aseguras. Debe llegar algo, más tarde o más temprano. La variedad no se remite sólo a esto. ¿A nadie le encanta quedar con gente distinta? A mí sí. El reto de conocer gente nueva, o el de salir con gente que hace mucho tiempo no ves, o el de intentar conocer más a una (o varias) personas. Tú ya sabes que la Luna a mí siempre me sabe a poco. Y consumo las horas mientras encuentro alguna luna que ande sola.

Pues ya ves, no quiero elegir. Lo quiero todo. Quiero mil planes, cumplir sueños. Lo malo es que debería empezar a relajarme, no? Exámenes, etc. Eso no me viene bien. Corro demasiado riesgo de descontrolar... porque cuando controlo, aparece la sombra de una acción, aparece la opción que hace daño a muchas personas. Mr. Torture gives pain with his whips and his chains (el Sr. Tortura proporciona dolor con sus látigos y cadenas). Las cadenas de la monotonía y los látigos de lo que no debería pasar.

Sykler